Ha sido su virtud y su cruz. En los años de bonanza, la concesión de hipotecas se convirtió en el maná de las cajas de ahorros, que aprovecharon el boom inmobiliario para multiplicar este tipo de créditos.
Y lo hicieron con gran éxito, ya que consiguieron robar a los bancos la mitad del negocio financiero del país. Sin embargo, todo ha cambiado en el último año, debido al melón que se abrió con el proceso de fusiones.
Mes a mes, las cajas han ido perdiendo cuota de mercado, hasta el punto de que el pasado noviembre apenas concedieron el 27% de las nuevas hipotecas, frente al 56,5% de los bancos, según los datos del INE (el 16% restante corresponde a otras entidades, como cooperativas de ahorro).
Para hacerse una idea del desplome que hay detrás de estos números, basta con echar la vista atrás, hasta noviembre de 2010. Entonces, las cajas firmaron el 51,8% de estos créditos, frente al 35,8% de los bancos.
Suma y sigue, porque si nos remontamos a justo antes de la crisis, es decir, a noviembre de 2007, el porcentaje es un apabullante 60%-30% a favor de las cajas en ese mes.
El peso de las fusiones
¿Qué ha pasado? Por una parte, la peor situación en que estaba el balance de las cajas de ahorros ha hecho que hayan tenido que cerrar más el crédito que los bancos, con las hipotecas a la cabeza.
Pero el verdadero detonante ha sido el proceso de fusiones emprendido hace un año. Éste es fruto de los nuevos requisitos de capital que está exigiendo el regulador a las entidades.
Las cajas, al contar con balances más débiles de partida, y al exigírseles unos mayores ratios de solvencia, están teniendo que hacer un mayor esfuerzo para llegar a los nuevos requisitos exigidos por el Banco de España.
Para cumplirlos, además de haberse embarcado en el citado proceso de fusiones, han tenido que cercenar el crédito y lanzarse a captar depósitos, porque mientras que los primeros estropean la foto de la solvencia, los segundos la mejoran.
Cambio de papeles
El nuevo guión impuesto está haciendo que bancos y cajas se cambien los papeles y mientras los primeros están perdiendo cuota de mercado en depósitos, las segundas lo están haciendo en hipotecas.
Así, con fecha de noviembre, las cajas han incrementado un 0,68% su peso en depósitos y los bancos han perdido un 1,03%. En cambio, las cajas han visto caer un 4% los créditos a la clienta, por un recorte de sólo el 1% en los bancos.
No obstante, gracias al ingente negocio hipotecario que hicieron las primeras en el pasado, todavía tienen la mayoría de este tipo de préstamos, el 55,2%. Pero, como cada vez conceden menos, y cada vez se les exige mayor solvencia, en breve pueden dejar de ostentar este trono.
Como muestra, un botón: aquí tienes el porcentaje de quien ha concedido más hipotecas cada mes durante el último año. La evolución, según los datos del INE, habla por sí sola.
Noviembre 2010: las cajas concedieron el 51,8% del total de hipotecas firmadas ese mes, los bancos, el 35,8%.
Diciembre 2010: cajas (51,2%), bancos (37,7%) y otras entidades financieras (11,1%).
Enero 2011: cajas (51,5%), bancos (35,6%) y otras entidades financieras (12,9%).
Febrero 2011: cajas (50,8%), bancos (37,2%) y otras entidades financieras (12,0%).
Marzo 2011: cajas (48,9%), bancos (38,2%) y otras entidades financieras (12,9%).
Abril 2011: cajas (49,2%), bancos (37,5%) y otras entidades financieras (13,3%).
Mayo 2011: cajas (50,1%), bancos (36,1%) y otras entidades financieras (13,8%).
Junio 2011: cajas (47,5%), bancos (37,7%) y otras entidades financieras (14,8%).
Julio 2011: cajas (49,4%), bancos (37,4%) y otras entidades financieras (13,2%).
Agosto 2011: cajas (43,6%), bancos (41,7%) y otras entidades financieras (14,7%).
Septiembre 2011: bancos (49,9% del total), cajas (36,0%) y otras entidades financieras (14,1%).
Octubre 2011: bancos (51,0% del total), cajas (34,9%) y otras entidades financieras (14,1%).
Noviembre 2011: bancos (56,5%), cajas (27,5%) y otras entidades financieras (16,0%).
No hay comentarios:
Publicar un comentario