sábado, 7 de mayo de 2011

Se buscan vírgenes con generoso busto para una plantación de té

En Henan, China, una agencia de publicidad solicita chicas con buena delantera para recoger té. Se trata de una campaña basada en una leyenda sobre esta bebida, según la cual algunos vendedores de té chinos utilizaban a vírgenes de 16 años para recoger las hojas por la noche y apretarlas entre sus pechos. La idea era que las hojas de té absorbieran la esencia del cuerpo de las chicas, lo que incrementaba el sabor del producto.



Según la descripción de la tarea, emitida por la Henan Gushi Xijiuhua Mountain Development Co. Ltd., las chicas deben introducir las hojas en su boca y luego escupirlas en una especie de embudo que desemboca en un envase que sostienen entre las tetas. La razón es que el té, por ese procedimiento, se impregnará de las cualidades femeninas de la virginidad, o “yin”.



Las chicas contratadas serán entrenadas debidamente y recibirán unos 55 euros diarios por su delicado rabajo. También representarán al “Té virginal” en el festival de té que se celebrará el 18 de mayo.



Imagino que ese té costará un dineral, no solo por lo complicado de su cosecha, sino por lo difícil que debe ser encontrar vírgenes a estas alturas de la película.



Lo que ahora me explico es toda la parafernalia que acompaña al consumo de esta tisana en los países orientales: se trata de impregnarse del yin.



Yo le tomé antipatía a esta bebida tras mi experiencia en un hotel de Maidenhead (Inglaterra); me despertaban todos los días, a las 6 de la mañana, con un "early morning tea" que no había pedido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario