Telefónica y Vodafone han decidido dejar de regalar teléfonos como estrategia para captar nuevos clientes. A cambio, prometen ofrecer mejores tarifas y centrar sus esfuerzos en mimar a los clientes, por encima de captar otros nuevos.
Pero, ¿qué motivos les han llevado a tomar está decisión? Aquí tienes los cinco más importantes.
1-. Coste insostenible: El consejero delegado de Vodafone, Francisco Román, dejó ayer claro el primer motivo por el que las grandes operadoras están dejando de regalar móviles como gancho para captar nuevos clientes. Y éste no es ni más ni menos que una cuestión de costes: sale demasiado caro. Como dato, basta decir que la filial española de la empresa británica destina más dinero a esta partida que a infraestructura, hasta el punto de que subvencionar los móviles, para una compañía como Vodafone, puede suponer entre 1.600 y 2.000 millones anuales.
2-. Hacerse trampas al solitario: Toda esta inversión, para colmo, no ha servido para retener clientes, sólo para captarlos y, una vez terminado el periodo de permanencia, ver cómo se iban a la competencia a por un móvil mejor. Es lo que se conoce en el sector como efecto lavadora y, en los últimos tiempos, ha llegado incluso al punto de que algunos de estos clientes, una vez cumplido el periodo de permanencia, como estaban contentos con su aparato, ni siquiera se han ido con otra gran compañía, sino que "han dado el salto a un operador móvil virtual, porque ofrecemos tarifas menores con el mejor servicio", explican desde Pepephone.
3-. Los smartphone no son rentables: La irrupción del iPhone y la oleada de smartphones que le han sucedido ha hecho imposible continuar con esta política comercial. "Los nuevos móviles son muy caros y, para rentabilizarlos durante todo el periodo de permanencia, las grandes operadoras tienen que imponer tarifas muy elevadas", explica Meinrad Spenger, consejero delegado de MásMóvil. Por ejemplo, frente a los 200 euros que puede costar un móvil tradicional de alta gama, están los 600 euros necesarios para hacerse con un iPhone 4S o un Samsung Galaxy SII, una diferencia de 400 euros que las operadoras necesitan cobrar en la tarifa mensual durante un plazo medio de 24 meses. ¿Moraleja? 16 euros más de factura mensual. Y eso, sin hacer ni una llamada.
4-. Cambios de hábitos de los clientes: La confianza que siempre ofrece lo conocido ha hecho que el trasvase a la alternativa que suponen los operadores móviles virtuales (OMV) haya sido paulatina. Pero, en los últimos meses, está cogiendo velocidad de crucero, debido a que estas empresas están alcanzando un punto de madurez, son cada vez más conocidas por los clientes y éstos confían cada vez más en ellas, con el respaldo de estudios que, además, les confieren el mejor trato al cliente. Algo que está obligando a las grandes a seguir su ejemplo de trato al cliente.
5-. Los efectos de la crisis: Al cambio de hábito de los clientes, natural en todo mercado que va madurando, se ha sumado la crisis y la necesidad de ofrecer tarifas cada vez más baratas, una coyuntura que ha jugado en favor de los OMV y en contra de las grandes operadoras. Como ejemplo, basta señalar que sólo en 2011 Movistar y Vodafone perdieron 800.000 clientes, mientras que los operadores virtuales ganaron 1,2 millones.
Al final lo mejor es tratar de vender nuestros moviles y comprar los nuevos de segunda mano, hay sitios como VenderMovil.net que puede ser una opción. A mi no me ha ido mal.
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