Ganar dinero con una App es más difícil que escribir un best seller

Hay miles de aplicaciones listas para descargar en móviles y tablets, y miles de personas desarrollándolas, lo que apunta a pensar que es un negocio redondo. ¿Es así? Ni mucho menos.

"Ganar dinero con una aplicación es más complicado que vender un Best Seller", asegura Jaime García Cantero, analista independiente. "Lo único en que puede confiar un desarrollador es en crear un programa interesante y gratuito y que una empresa grande acabe por comprar la idea. Y si no, pensemos en WhatsApp, ¿por qué es gratis? Porque su modelo de negocio es justo ése", añade.

Algo similar piensa Enrique Dans, profesor de Sistemas de Información en IE Business School: "Es difícil, muy complicado, y ganar dinero depende de muchos factores".

El más importante de ellos es la viralidad. "Hay que desarrollar un programa que sea susceptible de que la gente lo comparta entre sí y se expanda deprisa. Debe ser algo novedoso, útil, quizás con un toque de humor...", manifiesta el profesor.

"Las cosas más sencillas son las que suelen funcionar mejor. Es muy importante la experiencia de usuario. El potencial cliente de la misma debe encontrarla fácil de utilizar y sencilla de comprender", subraya Cantero.

¿Por qué no se gana dinero con las aplicaciones?

La primera barrera para ganar dinero se encuentra en que el usuario no está dispuesto a pagar.

"El modelo ideal para ganar dinero sería cobrar por la aplicación, pero poca gente está dispuesta a gastarse dinero en este negocio", desvela Fernando Calvo, socio fundador de Spotbros, una aplicación de mensajería instantánea pensada para movimientos como el 15M.

"El camino, en muchos casos, es ofrecer una versión gratuita del producto pero con limitaciones, como un tiempo reducido de uso o menores funciones disponibles, y proponer también otra versión de pago, muy ajustada en precio y sin restricciones de ningún tipo", explica Calvo.

"Lo que interesa para que tu aplicación sea descargada es que ocupe los primeros puestos en las tiendas de Apple o Android, y para ello es casi imprescindible que no cueste nada. Es decir, primero hay que llegar a la gente y luego ver el modelo de negocio", remarca el directivo.