Científicos estadounidenses han identificado ciertas células madre en la capa de grasa que hay bajo la piel que mandan señales moleculares que determinan cuándo crece el pelo. De hecho, cuando el cabello muere, la capa de grasa del cuerpo cabelludo se encoje. Por el contrario, mientras crece el pelo esta misma capa de células se expande en un proceso conocido como adipogénesis. Una de las moléculas que producen las células de grasa se conoce con el nombre de PDGF (siglas en inglés de Factor de Crecimiento Derivado de Plaquetas), y ya se había asociado previamente con el crecimiento del pelo.
Los hombres que sufren calvicie conservan células madre en la raíz del pelo, pero estas han perdido la capacidad de activarse para regenerarlo y permanecen “adormecidas”. Ahora que los científicos saben de dónde procede la orden que necesitan para activarse, la alopecia podría tener sus días contados. “Si conseguimos que las células de grasa ‘hablen’ con las células madre de la raíz del folículo capilar, podríamos lograr que el cabello volviese a crecer”, asegura Valerie Horsley, investigadora de la Universidad de Yale (EE UU) y coautora del estudio que publica hoy la revista Cell.
No hay comentarios:
Publicar un comentario